La Muerte Visita al Dentista, de Agatha Christie

Hacía tanto que no podía sentarme con gusto a realizar una reseña. Y no hay mejor manera de recomenzar que, con una de las novelas de Agatha Christie, en esta oportunidad, con La Muerte Visita al Dentista.

Sin lugar a dudas, uno de los placeres que tengo como lector, es disfrutar de las novelas de la dama anteriormente mencionada. He de confesar que no son muchas las historias que de ella he leído pero las pocas que llevo, han dado paso a que siga queriendo leerlas todas.

En La muerte visita al dentista, un aparente caso de suicidio se complica con un supuesto error médico por parte del Dr. Morley, Poirot, como no es de extrañar, va al dentista en la ocasión que todo esto sucede, viéndose mezclado sin remedio alguno. Indagará, se sorprenderá y nos sorprenderá a nosotros, hasta llegar a un punto final bastante impresionante.

No quiero desvelar mucho, pues la historia es un tanto corta.  La novela comienza con la visita al dentista de nuestro famoso detective Hércules Poirot y la de una serie de personajes diferentes entre sí, que luego no son más que un puñado de sospechosos. El título de cada capítulo, se debe a cada parte de una canción infantil que acompaña el juego de la rayuela, traducido al principio del libro.

La forma en que Agatha Christie narra sus historias, es definitivamente única y clásica. Me he leído la novela en un abrir y cerrar de ojos, disfrutando cada párrafo, tratando en vano de encontrar entre líneas alguna pista que me conllevara a resolver el misterio, pues hasta Poirot se ha visto en apuros. Todos los personajes me han parecido muy bien definidos, caracterizado cada cual con su posición y sin luego parecer vacíos. Se hace uso de las descripciones necesarias, debido a que se nos es fácil lograr imaginar la escena en que transcurre todo. Un punto que me ha gustado mucho, es la perspectiva que todos los personajes tienen con respecto al hecho de ir al dentista. Personalmente no es de mi agrado todas aquellos instrumentos que usan para mantenerle a uno la dentadura como es debido, aunque es sumamente necesario y no toca negarse.

La tensión se mantiene a lo largo de todo el libro, haciéndonos pasar página tras página con suma ansiedad. Soy de los que admira el estilo elegante que impregna los libros de esta famosa autora, reflejando así muchos de los oscuros sentimientos humanos, pues para mí cada historia que salió de la pluma de Christie, tiene su fondo de interpretación.

Cabe resaltar, la impecable interpretación del pequeño de bigote recortado y cabeza ovoide, Poirot, luciéndose una vez más y demostrando nuevamente aquel egocentrismo y cinismo que lo caracteriza. Él si es superior a muchos otros.

Por último, el final me ha parecido honestamente inesperado e impresionante. No me lo esperaba y eso me ha gustado mucho. Creo que ha sido bastante bueno, ya que la autora ha jugado con nosotros.

Y recuerden: Cuando Poirot piensa que es asesinato, es porque sin lugar a dudas lo es.

¿En qué lugar un hombre está más indefenso que en el sillón de su dentista?